La República Democrática del Congo (RDC) declaró oficialmente el miércoles el fin de su undécimo brote de ébola, seis meses después de que se informaran los primeros casos del virus mortal.
«¡No fue fácil, pero lo logramos!», tuiteó el Dr. Matshidiso Moeti, director Regional de la Organización Mundial de la Salud para África. La OMS hizo el anuncio junto con el ministro de Salud de la República Democrática del Congo, Eteni Longondo.
Habían pasado 42 días desde que el último caso confirmado dio negativo, según la OMS. No se han reportado nuevos casos confirmados desde el 28 de septiembre.
El brote comenzó el 1 de junio en la provincia occidental de Ecuador en RDC, justo cuando otro brote estaba disminuyendo en el este del país. El brote en el este fue el segundo brote de ébola más letal del mundo registrado y se declaró oficialmente terminado el 25 de junio, pero el de Ecuador apenas estaba comenzando.
Cuando terminó el brote de la provincia de Ecuador, tenía 130 casos confirmados: 75 recuperaciones y 55 muertes.
Los dos brotes estaban geográficamente alejados y el análisis de secuenciación genética confirmó que no estaban relacionados.
El brote de ébola en la provincia de Ecuador en el Congo
El brote de Ecuador supuso un enorme desafío logístico para los trabajadores sanitarios y humanitarios de la OMS, grupos locales y agencias gubernamentales. No solo se produjo en medio de la pandemia del covid-19, cuando los recursos ya estaban agotados, sino que el brote se localizó en comunidades a través de densas selvas tropicales y aldeas remotas, dijo la OMS en un comunicado de prensa.